Carta a un extraño

Creo que es imposible recordar el primer sueño que uno tuvo, porque son tan improvisados que nuestra mente no tiene calculado en que momento pasará. Toda mi vida estuve vinculada a los sueños, desde que tengo uso de razón me acompañaron unos tantos, complicados, sencillos, indefendibles, mágicos, de otras vidas y quien sabe que otras tantas definiciones le puedo dar, pero entre esos tantos me acompañas tu, aún no se que nombre ponerte, pero me gustaría contar nuestra historia....

Recuerdo la primera vez que soñé contigo, creo que tenia entre siete u ocho años, estabas de espaldas como siempre, pero yo podía sentir como sonreías, tu pelo era clarito como el cielo al atardecer, amarillo enrojecido, un castaño brillante, como tus ojos, que para ser sincera nunca he logrado ver, pero yo lo podía sentir, eramos dos nenes, jugando a ser felices, o capaz lo eramos, ese árbol donde jugábamos aún no lo he podido encontrar pero prometí hacerlo, y sigue en deuda, pero creo que ya estoy en el lugar indicado.

Últimamente te he tenido muy presente, o es que tu me tienes muy presente a mi, aveces me pregunto si pasas por lo mismo que yo, en donde quiera que estés, si tu sueñas conmigo, como lo hago yo reiteradas veces, si yo estoy cada vez más grande como tu en mis sueños, aveces me pregunto si tu me buscas entre la gente como yo mientras camino planeo encontrar tu sonrisa en algún desconocido.

Anoche creo que fue el encuentro más lindo que tuvimos, era feliz, me sentía tan feliz, tu abrazo me envolvía mientras caminábamos, te contaba un secreto que tengo bien guardado, tu solo reías, y me decías que lo sabias, luego te echabas en mis piernas mientras el cielo ya obscurecía, teníamos una charla tan profunda y ahí, ahí volvía tu sonrisa, esa que recuerdo como la primera vez que la vi, ya estamos tan grandes mi querido extraño que aveces me pregunto si me haré vieja soñando contigo o esperando por ti.

La sensación de ausencia que he sentido al abrir los ojos me ha atormentado todo el día, ¿como en 8 horas de sueño o seguramente menos puede hacerse humo tal amor?, estoy esperando que el universo nos ponga en el mismo lugar, estoy deseando que estés en esta vida y no en una pasada, estoy soñando despierta con este reencuentro, igual tal sensación debe ser por que tu, mi querido extraño, debes estar en tu cama, como yo, capaz escribiendo de mi, de nuestra historia, porque si en esta vida no nos encontramos, te prometo, nuestra historia será leyenda así sea tan solo un sueño.

Mi querido extraño, hoy te escribo con nostalgia, extrañándote sin conocerte y deseando que donde quiera que estés, sepas que pronto nos volveremos a ver...